En un mundo adultocentrista, este proyecto busca dar un giro y destacar la perspectiva de la niñez para recuperar los espacios públicos.
La primera experiencia piloto se está llevando a cabo en Villa Berlín, Cerro Placeres, donde se logró integrar la participación de los propios niños y niñas. De esta forma, se decidió la inclusión de elementos como un muro de escalada, juegos, murales, entre otros.